El papel de la mujer en la sociedad está cambiando, y así lo confirman muchos hechos, como que cada vez las mujeres tienen hijos más tarde (como consecuencia de sus carreras profesionales, entre otros factores), o también el hecho de que la mayoría de los jóvenes que entran en la universidad son mujeres.
La sociedad ha avanzado, y siempre habrá misóginos y retrógrados que estarán anclados en las viejas costumbres y que no quieren avanzar. Pero en la sociedad de hoy en día necesitamos a la mujer más que nunca en todos los sectores, pero además con los mismos Derechos que el hombre. Se ha quedado anticuado (pero no por tanto abolido) la costumbre de pagar menos por el hecho de ser mujer.
Depende mucho de los sectores laborales para determinar en qué porcentaje las mujeres cobran menos que los hombres. Y además también depende del área dónde nos encontremos, ya que en los núcleos urbanos los sueldos no son tan dispares cómo si lo son en las áreas rurales en las que el concepto de igualdad está difuminado por las costumbres.
Recientemente las mujeres han salido a la calle para alzar su voz contra un suceso social que ha revolucionado al genero femenino. Todo tiene que ver con la sentencia que ha sido publicada hace recientemente, y que a pesar de una gran cantidad de pruebas a favor de la violación, ha condenado a los imputados por un delito de agresión sexual. Aquí os dejamos un enlace para diferenciar los tipos delictivos.
Como decimos, habían indicios realmente suficientes para entender que existe una violación y no una agresión sexual. Y a pesar de ello los tres Magistrados que componen el Tribunal han sentenciado a los condenados por un delito que no ha convencido ni a la sociedad ni a las mujeres.
Aquí nos encontramos con una situación muy difícil, ya que intentando evitar hablar sin conocimiento de causa, tenemos que entender que el trabajo de los Magistrados. En España, a diferencia de otros países como Estados Unidos, los Jueces se eligen mediante duras oposiciones, y tienen que ser imparciales y no dejarse influir por sus ideas. Criticar a un Juez o Magistrado de que ha tomado una situación incorrecta es normal, y para eso existen los recursos.
Pero lo que no es normal a todas luces es la situación en la que quedan las mujeres en la sociedad, ya que en esta ocasión existía la posibilidad de ofrecer a la sociedad y al mundo jurídico una Sentencia que protegiera a la mujer, sentando un precedente que daría un plus de seguridad a las mujeres.
A pesar de todo lo mencionado en el presente artículo, el tema que nos trae hoy es el papel de la mujer en la literatura. En concreto vamos a hablar de cifras que muestran la relevancia de las mujeres en el sector literario, y también hablaremos sobre un reciente manifiesto realizado por Las Mujeres del Libro.
El género femenino hace crecer la literatura.
Un grupo de mujeres de diferentes provincias (Comunidad Valenciana, Madrid, Cataluña y Asturias), y cuyo objetivo es reunirse para conocerse y organizar un plan de acción para ayudar a visibilizar a la mujer de forma igualitaria a los hombres en el mundo editorial, han realizado un importante manifiesto en contestación a una columna de Vargas Llosa.
Este manifiesto es una forma de hacer ver la relevancia de la mujer en el mundo editorial. De hecho, según el propio escrito la media de trabajadoras en cualquier editorial oscila entre el setenta o el ochenta por ciento, pero estos porcentajes se reducen en los puestos de alta dirección, de los cuales alrededor de un ochenta por ciento están ocupados por hombres.
La visibilidad de las mujeres en el sector del libro también mengua cuando se habla de premios. Desde 1975, tan solo cuatro han ganado el Premio Nacional de Ensayo, las mismas que se hicieron con el Premio Nacional de Literatura Dramática, que se entrega desde 1992. En 40 años de Premio Nacional de Narrativa, solo tres mujeres se alzaron con el galardón. Igual que en el Premio Nacional de Poesía, celebrado también desde 1977. Pero si se trata de Narrativa Juvenil, la cosa cambia, aunque solo un poco: desde 1978, ha sido otorgado a diez mujeres.
Pero la mujer no solo escribe ensayos, literatura dramática o narrativa, sino que también hay que recordar a las mujeres investigadores que escriben libros de divulgación científica o de temática educativa. Aquí juega un papel importante la editorial Ediciones Aljibe, una editorial referente en publicaciones de temática educativa, cuyas publicaciones están orientadas a la mejora de la atención a la diversidad.
Para finalizar, hemos visto cómo las mujeres están presente en las editoriales de forma mayoritaria, pero no tienen casi presencia en los puestos de dirección. Esto nos tiene que hacer replantearnos esta situación, y buscar soluciones para que de una vez por todas se reconozca a la mujer la importancia que merece.
