La pandemia que hemos tenido a nuestro alrededor en el último año y medio ha condicionado nuestro modelo de vida en todo este tiempo y, por si fuera poco, ha hecho que cambiemos nuestra perspectiva en algún que otro punto. El asunto del que os vamos a hablar en todos estos párrafos que siguen es una de esas perspectivas que ha cambiado. Hablamos del turismo, que no solo se ha resentido en cuanto a ingresos durante todos estos meses, sino que además ahora ha cambiado en cuanto a preferencias entre los viajeros. Y es que, ahora, el turismo rural ha ganado enteros en detrimento del turismo tradicional de sol y playa que era costumbre en España.
Con motivo de evitar aglomeraciones indeseadas, la gente ha decidido, durante el verano pasado y también, por lo que estamos viendo, en este verano, evitar la playa y los lugares de costa, que siempre se han encontrado repletos de gente a estas alturas del año. Se trata de una decisión que, desde luego, es mucho más saludable y en la que es más idóneo prevenir posibles contagios. Y, además, y por si fuera poco, el entorno rural fomenta mucho más la tranquilidad y el descanso, que es lo que las familias andan buscando en el mes de agosto.
Una noticia publicada en la página web de Nius Diario informaba de que la gente que apuesta por el turismo rural lo hace intentando recuperar la vieja normalidad, esa que todos queremos que vuelva pero que todavía no hemos alcanzado del todo. Y es que es precisamente en este tipo de entornos donde existe el espacio y la tranquilidad suficiente como para intentar recuperar la vieja normalidad y olvidarnos de esas restricciones que han sido necesarias, por supuesto, pero que nos han amargado y mucho la existencia en los últimos tiempos.
Una noticia publicada en el diario El País, por su parte, informaba de que el turismo de interior y el rural se estaban sobreponiendo, precisamente por el tipo de cuestiones que comentábamos en el párrafo anterior, al coronavirus. Es cierta una cosa: que el aumento de turistas nacionales no ha conseguido cubrir todos y cada uno de los beneficios que proporcionaban en años anteriores el turismo extranjero. Pero sí que es cierto que, en momentos tan complicados como los que nos ha tocado vivir, la verdad es que el turismo de interior ha conseguido mantenerse en una posición de lo más destacable, salvando muchos negocios y muchos puestos de trabajo.
Llevamos un año y medio de pandemia y, aunque es cierto que este verano las restricciones son menores gracias en parte al gran trabajo que se viene realizando en lo que respecta a la vacunación, las tendencias iniciadas durante el verano de 2020 se han mantenido. Y eso quiere decir que la apuesta por el turismo rural se ha mantenido como una de las favoritas para una gran cantidad de familias en España. Es lo que nos han indicado recientemente desde Ruralzoom. Y es que sigue siendo en este tipo de entornos donde se ha alcanzado una gran dosis de normalidad al ser más indicado para prevenir las aglomeraciones.
En este buscador mencionado, podemos encontrar casas de turismo rural en Galicia , alojamientos rurales en Islas Canarias o cualquier otra ciudad y comprobar cómo muchas de ellas ya han colgado el cartel de completo en los principales puentes del año.
Una opción idónea para descansar nuestra mente
Lo que venimos notando en los últimos tiempos es que hay mucha gente que elige marcharse de vacaciones a un lugar de corte rural no solo para prevenir el contagio por coronavirus, sino también para ganar algo de paz mental. Llevamos unos meses en los que la mayoría de noticias que hemos recibido han sido malas. Y eso, obviamente, cansa mucho y desgasta psicológicamente a las personas. Es lógico que queramos encontrar una manera de combatir este tipo de sensaciones.
Y el turismo rural juega un papel muy importante en todo esto que os acabamos de comentar. Es algo que también han defendido muchos psicólogos y, sobre todo, muchas de las personas que ya se decantaron por una opción como de la que venimos hablando durante el verano pasado. Ni que decir tiene que son estos los mejores argumentos como para decantarse por un viajecito rural este verano también. Es la opción por la que ha vuelto a apostar una gran cantidad de personas de cara a este verano del 2021.
Estamos cerca del final de la pandemia, pero es cierto que debemos seguir teniendo cuidado porque la batalla no está del todo ganada. En las últimas semanas hemos visto el aumento de los contagios y la verdad es que eso nos indica que todavía hay peligros que debemos soliviantar. La vacuna está siendo una dosis de esperanza que, sin duda, nos está permitiendo recuperar nuestra vida poco a poco. Pero vayamos con precaución, que nunca se sabe. Y el turismo rural, desde luego, es una manera de mantener la precaución mientras disfrutamos de todos los beneficios que lleva asociados para nosotros.