Andalucía es una de las comunidades autónomas más visitadas de nuestro país, una zona con un clima muy agradable en invierno y que en verano eleva el mercurio hasta límites bien altos, sin embargo y pese a esto, cada año recibe un mayor número de visitantes que optan por el sur de España para pasar su tiempo de ocio. Suelen ser viajes cortos de dos o tres días, normalmente en función de las ciudades o zonas concretas que vayamos a visitar, si se trata de turistas españoles, a menos que estos vayan en una excursión. En el caso de ser foráneos, lo más habitual es que pasen en torno a una semana por tierras andaluzas. Lo más habitual, a excepción de momentos puntuales como los carnavales de Cádiz o el Gran Premio de España de motociclismo en Jerez de la Frontera, es que los turistas tomen como base la ciudad de Sevilla y es que en ella ya pueden pasar por lo menos dos jornadas completas conociéndola a fondo.
Sevilla es una ciudad que suma un total de 689.000 habitantes, lo que la hace ser la cuarta urbe más poblada de España, además de ser la capital de la provincia y también la capital de toda la comunidad autónoma de Andalucía. Fue en 1992 la sede de la Exposición Universal con una duración de seis meses, un evento que le aupó a la primera línea mundial y gracias a la cual, a día de hoy sigue recibiendo turistas, tantos que es de las pocas ciudades de nuestro país que sobrevive a la caída que estamos viviendo del turismo extranjero, sobre todo durante el verano. Además, Sevilla está llegando a registrar todavía más visitas que en el mes de marzo, momento en el que vivió, como cada año, su auge con la Semana Santa.
Para los que no la conozcáis, a continuación, os queremos detallar algunos de los monumentos más emblemáticos que componen la ciudad y que hacen de ella un lugar único y mágico al que una vez hayamos ido por primera vez, repetiremos.
- El Real Alcázar es una de las visitas más habituales. Un palacio que data del siglo XI y en el que nos podremos perder un par de horas admirando su belleza y, por supuesto, la de los jardines que lo rodean y que cuentan con un gran valor natural. La entrada es de pago.
- Esta es una de las construcciones góticas eclesiásticas más imponentes de Europa. Además, los que la visiten podrán ver los restos del descubridor de América, Cristóbal Colón.
- Visitar Sevilla y no pasear por el barrio de Triana tendría que ser delito y es que esta es una de las zonas más pintorescas de la ciudad y con más arte en sus calles.
- Subir a la Giralda es otro de los imprescindibles de toda visita a Sevilla. Una de las construcciones más reconocidas por el mundo adelante. La entrada, al igual que en el Real Alcázar, es de pago.
- Las terrazas. Últimamente se están poniendo bastante de moda en todas las ciudades de nuestro país, así que aquí no iban a ser menos y a lo largo de toda la ciudad existen varias terrazas para disfrutar de bellas panorámicas.
- Plaza de España. Se construyó para la Exposición Iberoamericana de 1929 y es uno de los puntos más visitados por turistas españoles y es que en ella podemos encontrar 48 bancos con azulejos que representan los escudos y nombres de cada una de las provincias que componen España.
- Torre del oro. Junto al río Guadalquivir, esta es una de las estampas más bellas de la ciudad y es que a pesar de no ser muy alta, la grandiosidad se representa en su reflejo en el agua.
Otros emblemas de la ciudad no tan conocidos para los turistas
La ciudad de Sevilla esconde otros muchos emblemas los cuales no son tan conocidos para los turistas, pero los cuales os vamos a desvelar. Un ejemplo de ellos lo encontramos en la calle Padre Luis María LLop, donde encontramos la casa natal del pintor Velázquez. Una edificación la cual también perteneció a Victorio y Lucchino y de la que solo podemos disfrutar de su fachada y su historia. Otro de estos ejemplos lo encontramos en el hotel Mercer Sevilla, un establecimiento de cinco estrellas que se ubica en la casa palacio Castelar, un edificio emblemático en pleno centro de la ciudad, donde, además de admirar su belleza, podremos descansar plácidamente.
